Trabajar en un coworking es algo cada día más habitual y ya hace tiempo que dejó de ser una moda pasajera. De hecho, un gran número de espacios de trabajo compartido han abierto en los últimos años en todas las ciudades.
El éxito o el fracaso de este tipo de negocio comienza, en primer lugar, a partir de su concepto.
Cada uno tiene su propia idea al respecto. Unos buscan promover una dinámica de grupo. Otros, atraer a determinados grupos de trabajo. O, simplemente, ofrecer mesas a quienes no tienen espacio en casa.
Desde mi experiencia, como consultora de Feng Shui para empresas y particulares, creo que todos ellos deberían haber hablado con un experto de Feng Shui antes de abrir el coworking. Para asegurarse el éxito de este tipo de proyectos.
Personalmete, el coworking me parece una forma fantástica de trabajar en un entorno laboral compartido con otros profesionales. Ya sean autónomos, freelancers, pequeñas empresas, start-ups o, simplemente, personas que suelen trabajar ahora en sus home-offices y quieren salir de su rutina. Sin duda, es una atractiva alternativa a una oficina casera en el sótano, salón o dormitorio o al estrecho rincón de una ruidosa cafetería. ¿No te parece?
Trabajar en un coworking. Cómo saber cuál elegir
A la hora de buscar un espacio de coworking hay que tener unos puntos en cuenta. Y siempre es recomendable mirar los detalles que voy a indicar porque influirán en tu rendimiento profesional.
Recuerda que el lugar de trabajo es tan importante como nuestro hogar. Pasamos en él casi el mismo tiempo que en casa y tenemos la oportunidad de aprovechar su energía para convertirlo en un ambiente saludable. Y en una fuente de productividad y éxito.
#1 – Elementos básicos y oportunidades del entorno
En primer lugar, te sugiero comprobar si hay un servicio básico como puede ser una impresora común, wifi y otras facilidades para hacerse la vida más fácil.
Luego, mira si el sitio ofrezca un entorno creativo en el que puedas prosperar, intercambiar ideas y colaborar con otros profesionales.
#2 – Diseño y distribución del espacio
El diseño y la distribución del espacio son importantes porque afectan a la forma en que te relacionas con tus compañeros. Condiciona la forma en la que rendirás con tu trabajo y determina si es válida para encontrar colaboraciones fructíferas.
Asegúrate de que el espacio de coworking que elijas haya rediseñado el espacio de la oficina de forma creativa e inspiradora para ayudarte a trabajar mejor.
Porque, cada espacio tiene una estructura energética. El coworking no hace ninguna excepción. Y hay que tenerla en cuenta a la hora de diseñar y planificar las diferentes zonas.
Hay espacios que pueden utilizarse especialmente bien para actividades que requieren concentración. Y apoyarse allí en la energía predominante. Al igual que otros trabajos necesitan más energía estimulante para hacer flotar la creatividad.
Los espacios para trabajar en un coworking suelen estar diseñados muy abiertos pero hay partes que necesitan estar más acogedores. Por ejemplo, tienen que tener una zona de convivencia, como la cocina o cafetería, en común para los encuentros sociales. Pero, también, un área de despachos cerrados para poder hablar con más privacidad.
Teniendo estos aspectos en cuenta es fácil y exitoso de planificar de antemano dónde se ubicarán las zonas de escritorios abiertos, los despachos privados y las salas de conferencias.
#3 – Espacios de ocio
Hay un tema que hasta ahora se han visto en empresas como Google pero que, en los coworkings, está entrando con fuerza. Hablo de una zona de juegos. Es una forma divertida que ayuda a la gente a desahogarse de una llamada estresante o de un bloqueo creativo. Cada espacio conforme con su concepto puede poner ajedrez, juegos recreativos, un futbolín, una tabla de sudoku o cualquier otra propuesta lúdica que ayude a desconectar y reducir los niveles de estrés.
Pero, recuerda…Nada de juegos de pantalla. ¡Los ojos tienen que descansar!
#4 – Qué imagen transmite de tu marca el lugar donde trabajas
Hay otro punto que quiero destacar. Aunque tiene más que ver con tu marca profesional y no tanto con el Feng Shui.
Con la elección de un espacio u otro de trabajo estas sentando las bases de tu marca profesional. Tenlo en cuenta a la hora de elegir. Tu cliente te juzgará a ti y a tu trabajo por tu entorno laboral antes de que hayas tenido la oportunidad de mostrarle tu trabajo.
Así que, si decides trabajar en un coworking, asegúrate de que la sensación, el ambiente y la energía del espacio son los adecuados para su marca.
Detalles de Feng Shui para un coworking
En general, en las zonas de trabajo abiertas se aplican las mismas normas básicas de Feng Shui que en cualquier otro lugar de trabajo. Te recomiendo tener muy en cuenta estos 2 puntos que te comento a continuación.
1 – Ten una pared sólida detrás de ti
Si esto no es posible, se puede tener una pared visual en forma de plantas o estantes, por ejemplo. Te puedo asegurar que estos sitios que tienen esta protección en la espalda son los primeros escogidos por la gente. Curioso, ¿verdad?
2 – Sitúate en el lugar adecuado
Es preferible que la puerta esté a la vista y que ningún otro compañero este sentado delante de ti. Siempre hay que intentar sentarse en los diferentes extremos de las mesas y evitar trabajar justo uno enfrente del otro. Esto puede llevar a una tensión innecesaria y es fácil de cambiar.
Si tu coworking ha sido diseñado cumpliendo con el Feng Shui, asegúrate de que el puesto de trabajo es el adecuado para tu tarea.
Si tienes la mala suerte de estar en uno en el que hay mucha gente y donde no tienen en cuenta el Feng Shui, procura de buscarte un sitio adecuado para la tarea que vas a hacer en esa jornada laboral.
Por ejemplo, el día que hagas tu contabilidad, búscate una zona tranquila que te deje trabajar y concentrarte. El día que quieras hacer brainstorming para nuevos productos, o buscar una nueva estrategia de marketing, localiza un área que te inspire y donde puedas intercambiar ideas.
Te aseguro que si tienes estas cosas en cuenta mejorará tu trabajo y, por tanto tu negocio.
Me despido recordándote que, si ya te has animado a trabajar en un espacio de coworking, me gustaría conocer tu experiencia. Puedes escribirme contándome qué tal lo has vivido. Y, si necesitas ayuda para preparar tu espacio de trabajo, no dudes en consultarme. He ayudado a muchas empresas y autónomos y sé que podré ayudarte.